jueves, 26 de julio de 2007

Cuánto arte...

Aquí va una foto de nuestro colorido puestecito en la playa del Palmar, Conil de la Frontera, Cádiz, el paraíso. Desde el día que llegamos los compañeros y compañeras del gremio ambulante nos acogieron fenomenal, nos ayudaron a situarnos, nos ofrecieron víveres... recuerdo con cariño a Antonio, un tío alucinante, buena gente, un experimentado en el "arte de vivir con arte" y con buen corazón; a Patri que nos abrió las puertas de su casa; a Paola la argentina, gracias por la conversación en las horas bajas de venta; a Vicky, gracias por rebajarle a Ana los pantalones esos tan preciosos que vendía...




Y, por supuesto, gracias a Alberto, por tanta vida como tiene y desprende, por recordarnos que los manchegos somos así, que donde vamos cargamos hasta con el mantel bordado, la tortilla de patata y el pan del pueblo, la educación materna pesa y marca. Gracias por su hospitalidad, sus abrazos sentíos, sus chistes y su risa, pura como su arte.

3 comentarios:

Sergio Lecuona Granada dijo...

leyendo estas líneas me dan ganas de coger la maleta y tirar p´al sur... Aunque un resumen tan breve solo da una ligera idea de lo bien que te lo pasaste, para cuando un relato con detalles??

Anónimo dijo...

cuanto arte!!arte manchego de aqui y de allá..
arte de haber vivido y compartido esos ratitos con vos..el arte que sale de tus palabras..arte de vivir!!

Gilda dijo...

Leku, sí vete pal sur en cuanto puedas. Siento que el relato sea tan cortito, pero salió así.

Ay, cuánto arte nos rodea y cuánta carencia también...
Lo bueno es seguir creando, seguir probando y saber que la vida nos da una nueva oportunidad cada día...Aquellos que ya se crearon a sí mismos no valen nada.