pero ama el país donde ha nacido.
Uno no escoge el tiempo para venir al mundo;
pero debe dejar huella de su tiempo.
Nadie puede evadir su responsabilidad.
Nadie puede taparse los ojos, los oídos,
enmudecer y cortarse las manos.
Todos tenemos un deber de amor que cumplir,
una historia que nacer,
una meta que alcanzar.
No escogimos el momento para venir al mundo;
ahora podemos hacer el mundo
en que nacerá y crecerá
la semilla que trajimos con nosotros.
Gioconda Belli.
1 comentario:
Que sencillas palabras, que grande belleza.
En verdad estamos en deuda con nuestra Madre, la madre de todos, la que nos da tantas cosas sin que nosotros realmente las apreciemos. Y lo único que hacemos es devolver el favor con lo peor de nosotros.
Consuela conocer a aquellos que aman todo los que les rodea. Que fácil sería si toda la humanidad pensase de igual modo.
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